Genial, pues a ver si este lo compra alguien, porque lo que pasó con la primera parte no tiene nombre: un juego cojonudo en todos sus aspectos, con notazas en la prensa y a precio reducido desde su lanzamiento... pero que se comió un mojón en ventas y ahora, años después, resulta ser un juego de culto. Vamos, lo que viene a ser el síndrome sufrido por Panzer Dragoon, Psychonauts, Shenmue o ICO.
Esperemos que esta vez lo anuncien en el intermedio de El Internado y Fama, que si no la gente no se entera.