Yo creo que a estas alturas deberíamos diferenciar entre un Diógenes Maligno y uno Benigno, me explico. Hace unos meses estaba haciendo la maleta para irme fuera de España y un día en casa de mis padres descubrí una tarrina Verbatim de PS2. Ojeando por curiosidad ví que de un mismo juego tenía la edición Pal, Jap, USA y una del Año Nuevo Chino
, todas ellas fueron descargadas, quemadas y metidas en la tarrina. Eso fue en mi época oscura, digamos el Diógenes Maligno: únicamente descargar y almacenar, nada de recompensa más que ver cómo crecía exponencialmente la colección, sin probarlos siquiera ni compartirlo, NADA.
Hoy en día puede que según quién lo mire siga con Diógenes, pero ha pasado a ser benigno; ahora disfruto del camino, no del destino. Cada Martes miro con ilusión el hilo de Humble Bundle, se hacen apuestas, cuando aguien acierta varias seguidas ya es la locura y unas risas, te decepcionas con los juegos, te cagas en el PLUS y dices que no vas a renovar, encuentas una key tirada de precio y la compartes con amigos y con gente de aquí del foro todos "de caza", iba al Game a la sección de segunda mano y salía cabreado con los precios excepto cuando encuentras una ganga que nadie quiere o tienes la suerte de ser el primero en verla.
Sale un juego nuevo y estás pendiente del foro a ver dónde está por 5€ más barato y te dan una skin que no vas a usar en tu vida, mi novia me preguntó hace poco por qué daba tantas vueltas por algo así si no es nada de dinero, y le expliqué que justo por eso, por el camino, por lo que se hace antes de conseguirlo y no por el fin. Si fuera por el fin me lo compro y que me lo traigan a casa o tiro de digital y ni me muevo del sofá, pero ahora lo veo un poco más claro y acepto mi nuevo Diógenes Benigno.
Otro de mis "hobbys" es el diógenes audiovisual, me encanta eso de montarme mi servidor de streaming con Plex, descargarme las series, buscar una web nueva que tenga mejor calidad, luego encuentro otra que tiene la misma calidad pero añade las pistas de sonido en inglés con subtítulos, miro a ver a qué velocidad descargan, la policía cierra una web y hay que ir en la búsqueda de otra. Piensas que todo se acabó pero aparece una mejor, vuelta a empezar, etiquetar los archivos para que pille bien los metadatos con las carátulas, etc etc. Descargo unas y tengo que borrar otras para hacer espacio y pensar muy bien qué borro, al final no veo nada pero ahí está. Todo esto con el precio ridículo de Netflix lo tengo solucionado, pero Netflix es el fin del camino y no lo que pasa antes.
Al igual que me gusta jugar un buen juego o ver una buena película, escuchar música, salir con los amigos o la novia o ir a un concierto a pillar el pedo del año desde que he aceptado mi nuevo Diógenes Benigno me siento mejor, y lo que es más importante, disfruto de él.
Es un momento para mí en el que desconecto de la rutina, el primer paso es aceptarlo y en caso de que estéis todavía en la fase maligna os doy ánimos y sabed que en cuanto logréis reconducirlo seréis un poco más libres y, por qué no, más felices.