Según la ley de garantías en España, la garantía la da el vendedor, no el fabricante. Otra cosa es que el vendedor se suele lavar las manos, y como al final resulta ser un mero intermediario entre el consumidor y el fabricante, suele ser más ágil contactar directamente con éste último.
Si hay gastos de envío asociados, el vendedor ha de asumirlos. El consumidor no tiene por qué pagar un duro en transporte ante una avería. Por eso, en compras on-line es mejor asegurarse que realmente existe avería y tratar directamente con el vendedor.
Saludos.