jojuevaz escribió:No sé si sois muy jóvenes o no os gastáis dinero en vuestro ocio. Pero hace unos años un CD costaba entre 15 y 20€ y tenía 12 canciones de media. Con 8-9 CD's al año, pagas un Spotify familiar al año.
Y en los videoclubs pagabas 3€ por una sola película que tenías que devolver en 24-48h. Y tienes un Netflix (que no te lo acabas ni en dos vidas) por 7€ al mes, multidispositivo y con una gran calidad de vídeo y de contenidos.
A mi lo que me parece muy caro es una copa a 10€ (hielo, un refresco (agua con azúcar) y alcohol), una caña o un café a casi 2€. Y ya no hablamos de ir al cine con la familia porque te dejas fácilmente 30-40€.
Sin querer faltar al respeto a nadie, creo que no valoráis el acceso a una cantidad de cultura y ocio casi infinitos a precios reducidos. Nunca antes en la historia se ha tenido acceso a tanto contenido, de tanta calidad, accesible en cualquier sitio y en cualquier momento a un precio tan bajo.
Siempre el mismo discurso...
Lo primero crear tiene que ver con la cultura, el negocio alrededor de esta no tiene absolutamente nada que ver con la cultura. Es más en el momento que algo pasa a ser de pago deja de ser cultura para ser ocio, o como mucho un producto cultural, es decir producto es decir mercancía.
Y si, los CD costaban unas 2.500 pesetas (15 €), las ediciones más simples (de los cuales si 12 canciones, pero solo 2 canciones eran buenas). Porque como fueras a las lujosas que sacaban muchos artistas te superaban los 30 € tranquilamente. Aun me acuerdo uno de los primeros discos de David Bisbal cuando OT1 que costaba 35 € la edición platino.
Y las comparaciones que hacéis algunos. No puedes comparar una copa de algo con una canción o un disco, porque entre otras cosas son dos cosas distintas, aunque el continente sea físico (un CD no es más que un disco redondo, con varias capas, donde en una de ellas se graba. Y se crean miles con un precio ridículo. Por eso cuando te cobran 15 € no es lo que cuesta el CD sino lo que cuesta lo que hay dentro de este) es el contenido con esa forma etérea, tremendamente subjetiva de valorar los derechos de autor de dicho contenido. Cuando ese valor y ese precio que se pone, en realidad no tiene nada que ver con el talento del artista. La música es algo etéreo que no se pierde por muchas veces que se copie. Una copa te la bebes y tienen que ponerte otra, a veces ni el vaso es igual. Lo que quiero decir es que una es una propiedad física y la otra no. Con lo cual compararlas es absurdo.
Por otro lado el tema de los precios, no se que edad tienes sinceramente para hablar de juventud sobre otros o inexperiencia. Pero yo llevo viendo la evolución de los precios de la mal llamada cultura y no he visto que apenas hayan variado. Ahora bien tienes que coger todas las variables no las que te interesen a ti.
Hablas del tema de los vetustos videoclubes, yo no vi esa bajada de precios de la que hablas. Porque muchas de las plataformas online te siguen cobrando idéntico a lo que hacían los videoclubes físicos. Salvo temas de tarifas planas, en muchos servicios sigue siendo así. Si quieres un ejemplo de esto entra en Filmin por ejemplo.
Hay una cosa que siempre admiré de los creadores con copyright y de los que van de endiosados por crear algo. La capacidad que tienen para inventarse doscientos intermediarios en la cadena comercial. Se supone que Internet debería haber simplificado esta cadena, y en cierta parte lo ha hecho. Pero sinceramente cuando veo que un escritor, un músico, necesita doscientas personas que lo ayuden en Internet. Pienso dos cosas; si realmente saben como funciona Internet o si tienen tanto talento como creen, ya que se supone que si tienes tanto talento no necesitas que te hagan el trabajo tantas personas. Claro que crear y distribuir, publicitar tu propia obra en cansado. Mejor se lo dejamos a otros, lo que automáticamente hace que haya que pagar a esas personas y por ende que el precio de tu obra tenga que subir para amortizar esos gastos.
Todo esto sin hablar del circo monumental que es la Industria del copyright y sus tejemanejes varios para dar lecciones al resto, cuando simplemente no tienen derecho a dar ni una sola lección de ética y moral a la gente que descarga o ve streaming ilegal.
Una cosa que siempre me hizo gracia es lo del tema de la piratería como el mal supremo de esta Industria. El mal supremo de esta Industria tiene un nombre ¡avaricia! Artistas que creen que deben ser millonarios porque hay una ley universal que así lo dice, segundo distribuidoras que inflan los derechos porque les sale de las narices (algo parecido a lo que pasa en el deporte) estudios que usan artificios para inflar los presupuestos. Y luego llorar por la piratería... Y la propia creación de la MPAA y Hollywood que está fundadada en la piratería de la piratería (en el egocentrista Tomas. A. Edison que robaba todo lo que podía y luego lo patentaba para que nadie lo pudiese usar, siendo este el primer "troll" copyright y de patentes de la Historia)
Lo único que me fastidia del circo del copyright es que muchísimos actores, actrices, artistas no merecen que los denosten por las locuras de la Industria para la que trabajan. Y de hecho muchos de estos anteriores han demostrado ser muy humildes y no ir de endiosados por la vida.
Por último aguantar los discursos de supuesta solidaridad de artistas y deportistas millonarios es aburridísimo. Como cuando gente que tiene millones en su cuenta, dice que España no va tan mal.
A todo esto prefiero Jamendo.
Salu2