Triunfo de la enfermedad
"La vida se alarga y a la larga se acorta...
y se queda corta como esta vieja carretera."
Aquí está la marea y el mar que azotan
a este barranco como igualante rasero
que fue testigo de esta triste historia
que vio saltar hasta la ultima gota de sangre
como un distinguido torrente.
"Hallé, aquí, el destino ardiente del agua,
en la espuma plateada vi a la ola rebotar
contra la diamantina dureza de la roca,
contra el cáncer del cerebro de bellota,
que quiso acabar con mi vida de repente”.
Abrió su mente al viento y su cerebro a la arena,
se encomendó a la luna llena y partió su boca,
recuerdo no quedó ninguno, mas ahora no necesita,
mientras caía cerró fuertemente los párpados
y gritaba buscando eco en el vacío de la inmensidad.
Allá en lo alto encontró un par de nubes,
rozó con caricias el cielo y las perdió de vista,
frenó con su cara a la gravedad y murió engullido en el mar
ayer apareció en las revistas, su desgracia,
su último curso, su familia, su vida, su enfermedad...
Quería morir y asi lo hizo dejando esta vida al saltar,
como si a pellizcos en el hombro, fuese mañana a despertar.
Huesos deshechos, carne entregada a la sal,
heridas sin cura, ni piel ni armadura
ni pensamientos sobre llorar.