La primera igualdad puede que no, el perro del califato no tiene dueño, pero la segunda…
(No deja de ser curioso además que ambos países eran aliados de EEUU, uno secular y el otro islamista, el primero tuvo su revolución en la que los islamistas tomaron el poder y culparon a los imperialistas extranjeros del régimen anterior, mientras en el segundo ha seguido a lo suyo, islamizándose más si cabe. Seria poético que viniera un régimen secular a Arabia que culpara a los imperialistas extranjeros del anterior régimen. Pero mucho me parece que sólo vendrían otros islamistas, rollo Irán).