All of my hate cannot be found
I will not be drowned by your thoughtless scheming
So you can try to tear me down
Beat me to the ground
I will see you screaming
Esta no es la primera vez que escucho esta canción. No soy vieja, ni sabia, ni siquiera medio madura, pero ya escuché esta canción unas cuentas veces. Llega un momento en que las cosas dejan de sorprenderte, llega un momento en que, aunque sea imposible anticiparte a ello, sabes que nada te sorprenderá. Aún así, sigue siendo digno de mención la poca moral, la falsedad, la inseguridad del mundo. Bajo el lema de la igualdad y la tolerancia se esconden verdaderos traumas infantiles, hoy en día, tener las cosas claras, es ser hijo de un dictador. Bajo máscaras de empatía y juventud se esconden almas viejas, cansadas, reprimidas, sin olor, sin sueños. El conformismo es la droga de nuestro siglo. La objetividad... la utopía.
Un amigo no es un amigo con derecho a entrometerse en tu vida, un amigo sabe el lugar exacto que debe ocupar, sabe callar cuando debe hacerlo, sabe no posicionarse. Un amigo nunca te dice lo que tienes que hacer, te incita a tomar tu propia decisión; un amigo nunca te juzga. Esta es mi idea de amistad, esta y sólo esta.
Ya he escuchado antes esta canción. No me sorprende en absoluto
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