Exacto, yo hacía lo mismo. Además, desde una parte de la mesa llegas a darle cuando está en la otra parte, así que puedes darle y echarte hacia atrás, quedando a salvo.
Yo le daba con el táser y me ponía a dar vueltas a la mesa, repartiéndole algún cachetazo como digo arriba. Cuando se cargaba el táser: otra vez lo mismo.
Por cierto, en realidad es una cocinera, no?