Si el juego es fácil. Pero yo, un padre de familia, que juego muy poco, estoy desentrenado. Es una fase en la que el jefe (una especie de pato malvado), lanza sin parar una especie de rayos que atraviesan toda la pantalla y tengo que estar continuamente saltando. Encima él está protegido con un escudo que se desactiva de vez en cuando y encima lanza como unas llamaradas por el suelo que son casi imposibles de saltar. En fin, que el jodío no me deja ni respirar para pensar una estrategia para poder cargármelo.