Me ha sucedido varias veces.
Despierto, pero tengo un recuerdo,
mas bien, es un sentimiento.
Es la imagen tuya que no me ha abandonado nunca.
Y a veces se enciende la maquinaria del recuerdo,
esa maldita fabrica de nostalgia,
que trabaja demasiado y disparejamente,
como el corazón, ese organo que sirve para todo.
Aún te recuerdo, aún sueño contigo,
pero tu no existes mas en mi vocabulario.
Pienso en ti, me vuelvo tuyo, pero no me tienes.
Ese sueño no es mas que la evocación de alguien, de ti.
Y si, hoy me desperté con tu recuerdo,
no es que te extrañe, porque ese sentimiento es raro,
es mutante, es hiriente y sobre todo es bizarro.
No fue un abrupto despertar, mas bien algo gradual.
Desperté a un sueño, mas grande y extraño,
es la vida que me arrancas, solo con tu recuerdo.
Quedaste grabada en mi subconsciente, inexistente.
Insisto, no es que te extrañe, solo que hoy,
al despertar, comprendí al fin, que te amo.
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solo como curiosidad, el tema base de este texto, se me ocurrió cuando estaba dandome un baño