La potencia (W) es el producto del voltaje (V) y la intensidad (A). Para cualquier cacharro electrónico hay que tener en cuenta que el voltaje sea el correcto, y la intensidad al menos la que el cacharro necesita o superior.
En este caso, el voltaje es de 110V (el correcto) y el hecho de tener una potencia superior, lo único que indica es que es capaz de suministrar una mayor intensidad si el cacharro lo requiere.
Resumiendo, el de 300W funcionará tan bien como el de 100W. No era necesario comprar el otro.
Y si aun con esto, siguen existiendo dudas, echad un ojo al mundo del PC y las fuentes de alimentación, donde a un PC que requiere una fuente de 350W se le puede poner una de 500W, 700W, 1000W... y funciona sin ningún tipo de problemas.