Arranca en modo a prueba de fallos y restaura el sistema a una fecha anterior, en la que el PC funcionaba bien.
Parece que le sentó mal la actualización (quizá sea un fallo de la propia actualización, a veces pasa) o que te pudo entrar un virus, o hay un problema en el disco duro o algún otro tipo de problema. Para descartar un fallo de hardware del PC, restaura sistema a una fecha anterior.