Amigo y colega invisible, Prado que estás en la red, recibe mi felicitación por tu hermoso y nada azaroso poema. Breve, intenso y cargado de sentido. Me gustó y lo pongo aquí, para que se sepa. Ah, y lo de la reproducción de la hoja caligrafiada me chifla. Cosa fina, de artista. ¡Cuánto me gustaría a mí saber hacer esas virguerías! Hasta otra.