Belén Esteban, hundida y estafada por su representante y amigo

La eterna estrella de Telecinco ha tenido un sonado problema con el que era su manager y amigo íntimo. Belén ya no se habla con Toño, al que consideraba un hermano. El maldito parné.

Belén Esteban y Toño Sanchís ya no son pareja; en lo que, evidentemente, a lo profesional se refiere. Hay un antes y un después en la traición tan enorme que Belén podría haber sufrido del que, hasta ahora, consideraba como un hermano, como parte de su familia.

La propia Belén ha sido la encargada de confirmárnoslo y de confesar que lleva cuatro meses sin hablar con él. Si no quiere verle, menos aún saber cosas de su vida. Aunque todavía sigue unida a él de forma contractual.

De hecho, Toño sigue siendo su representante. Aunque Belén está buscando la forma de romper todos los lazos que le unen a Sanchís de la forma más rápida posible. Parece que entre ellos no hay solución posible y que la de San Blas no puede perdonar a Toño, como hizo con la traición de su querido Miguel.

Aunque Belén no quería hablar mucho más sobre lo que ha pasado en su relación con Toño –le duele y le afecta tanto lo ocurrido que se quería dar un tiempo-, al final, como le suele ocurrir a la vecina de Paracuellos, se le ha calentado la boca.

Duras acusaciones

La madre de Andreíta ha dado a entender que un amigo cercano le aconsejó que revisase sus cuentas, que, quizás, no iban a estar las cosas tan bien como ella pensaba. Y, así, se podría haber demostrado.

Según Belén tiene pruebas de todo. Lo tiene documentado. Y los rumores apuntan a la posibilidad de que, supuestamente, Toño se hubiese apropiado de un millón de euros de Belén sin que ésta se enterase. Un dinero que la ex de Jesulín podría tener guardado para el futuro de su hija Andrea.

Algo que, de ser cierto, es bastante grave. Como la misma Esteban dice: la avaricia rompe el saco. Quizás Toño se podría haber extralimitado en sus funciones de representante y querido sacar más dinero de lo que le correspondía en sus funciones profesionales. Algo que el mismo Kiko Matamoros ha sentido, según cuenta él, en sus propias carnes con Sanchís.

El caso es que el enfado es tal que Belén ha sacado a Toño de su testamento, en el que le tenía incluido como uno más de la familia. Por ahora, no puede decirnos más, porque sus abogados no la dejan, pero que esto traerá cola… ¡Seguro!

Un enfado que se suma a las acusaciones contra Toño Sanchís de haberse aprovechado de ciertos momentos de la vida de Belén para seguir enriqueciéndose. ¿Cómo? Vendiendo informaciones y dando pistas para que las exclusivas con la Esteban fuesen más jugosas o le reportaran, presuntamente, beneficios directos a él. Después de esto, poco nos queda por añadir.