El soporte físico para almacenar contenido audiovisual tiene los días contados. Desde finales de los años 90, hemos visto como los videoclubs de nuestros barrios han ido cerrando o transformándose en otro tipo de locales. Una de las cadenas más importantes a nivel mundial en el alquiler de videojuegos y películas ha sido la americana Blockbuster, la misma que ahora cierra las últimas 300 tiendas que aún le quedaban en territorio norteamericano.
El principio del finEn marzo de 2006, Blockbuster
cerraba sus 105 tiendas en España y despedía a 688 empleados, una noticia de la que
nos hicimos eco y que tuvo mucha controversia. La empresa americana señaló al alto grado de piratería en nuestro país, junto a la televisión digital, como principales "asesinos" de su cadena de videoclubs. Según los datos de la época, la piratería en España creció de un 5% a un 60% entre 2003 y 2006, y esto supuestamente provocó unas pérdidas de 5,5 millones de euros solo en 2004, un 65% más que en el ejercicio anterior. La empresa destacaba que estas pérdidas no se estaban dando en el resto de sus tiendas distribuidas por el continente europeo.
Aunque no fueron pocas las voces que se alzaron acusando a la propia Blockbuster de su fracaso, debido entre otras cosas al elevado precio que estaban alcanzando los alquileres o también a la falta de catálogo (más allá de los títulos de estreno). Un dato muy irónico si comparamos la cantidad de rarezas y cine clásico que poseía Blockbuster en sus primeros años, convirtiéndose así en visita obligada para todo tipo de cinéfilos.
Contenido digital, la próxima fronteraEstá claro que el contenido digital juega en contra del formato físico audiovisual, de ahí que ahora Blockbuster no acuse directamente a la piratería como la causa principal de su fracaso, tal y como hizo con nuestro país. Ahora la compañía señala a los medios de distribución digitales, véase el ejemplo de Netflix, una plataforma que ofrece películas y series por
streaming mediante el pago de una cuota mensual, todo por supuesto desde la legalidad. Netflix está disponible principalmente en EE.UU. y en un puñado de países más, aunque España no está incluida aún.
Blockbuster pertenece actualmente a Dish Network Corp, la cual ha informado que los locales cerrarán en enero y el servicio de DVD por correo se suprimirá el mes próximo. Cuando la empresa era propiedad de Viacom, allá por el año 2004, llegó a tener 9000 locales operativos en todo el mundo. Desde que Blockbuster pasó a formar parte de Dish Network se han cerrado 1700 tiendas.
Joseph Calyton, CEO de Dish Network Corp, ha explicado en un comunicado de prensa que "esto no es una decisión fácil, pero la demanda de los consumidores se está moviendo claramente a la distribución digital de entretenimiento audiovisual". "A pesar del cierre de nuestras tiendas físicas, seguimos viendo valor en la marca Blockbuster, y esperamos aprovechar esa marca a medida que continuamos expandiendo nuestras ofertas digitales". Por tanto, los planes de futuro de la compañía parecen dirigirse precisamente a ese emergente e imparable mercado digital.