Bueno, tras un fin de semana, puedo decir que
para mí sí han merecido la pena los 150€ del cambio de una a otra. Sólo por el hecho de poder jugar a 60 FPS a los juegos que antes tenía que jugar a 30 FPS ya merece la pena.
Cierto es que me llevé una pequeña sorpresa en forma de palo al descubrir que en algunos juegos había que elegir entre "modo gráfico" o "modo rendimiento", pero, en mi caso, al jugar en un proyector a 1080p he comprobado que a nivel visual es algo que no me va a afectar a día de hoy al menos.
Además, viendo lo que han conseguido con el Gears 5, haciendo que funcione a 4K y 60 FPS en todos los modos, me da cierta esperanza de que más adelante otros juegos también sean capaces de hacerlo y no tener que elegir entre un modo u otro y todo el rollo.
Ya digo, es
mi punto de vista. Está claro que lo ideal para sacarle el máximo rendimiento es tener una pantalla/proyector a 4K, pero en mi caso, habiendo jugado mucho en PCs de altas prestaciones,
el tema de los FPS es algo que
inclina mucho la balanza, aunque visualmente a 1080p no haya gran diferencia.
Amén de que renuevo la garantía, que la otra ya la tenía casi acabándose