No sólo es la revista. En el temario de bachillerato para mujeres había un divertido texto en el que se les instruía sobre cómo actuar para tener contentos a sus esposos. En dicho texto, además de inculcar la absoluta sumisión línea tras línea, se especificaba que no debían enfadarse si sus esposos salían a divertirse sin ellas... No recuerdo qué decía exactamente, pero creo recordar que se hacía alusión incluso a que no debían mostrarse molestas en absoluto aunque sus esposos se fueran a un club de alterne, vamos.
Por supuesto, todo debía estar a gusto del esposo cuando éste llegara a casa y nunca había que interrumpir una conversación entre hombres ni aburrir en exceso a tu marido contándole tus problemillas, ya que los temas de conversación de las mujeres son siempre menos importantes.