Las bolas de plasma son físicamente unas ampollas de cristal de cierto tamaño con un electrodo interno central, las cuales internamente están cargadas con un gas que al aplicarle una tensión conducen y generan una luz brillante visible en forma de plasma, donde su color e intensidad varia en función del gas con el que estén cargadas, la presión interna y de la alta tensión aplicada.
Para excitar una bola de plasma es suficiente con un generador tipo Flyback o similar.
Como gases principales se utilizan el Helio, Nitrógeno, Neón, Argón, Xenón, Kriptón, Gás carbónico (CO2) y combinaciones entre ellos. El más fácil de conseguir para métodos experimentales sería el Helio utilizado para el inflado de globos, el cual genera un plasma azul púrpura o el CO2 también puede ser fácil de obtener ya que se utiliza en bebidas gaseosas. Después está el Neón que utilizan los fabricantes de letreros luminosos.
La construcción no es compleja si se tienen conocimientos en la carga y manejo de tubos de neón y acceso a los utensilios necesarios, si no es así el aprendizaje y la maquinaria necesaria para llevar a cabo el proyecto nos harían desistir. Esto es debido a que para cargar una bola de cristal con un gas es necesario desalojar el que tiene dentro que es el “aire”, después tenemos que llenar la bola con la proporción exacta de gas correspondiente al efecto que deseamos y por ultimo precintarla convenientemente.