Es un conflicto generado por dos personas: tu ex amiga y tu pareja. Si ambas están de acuerdo, te toca dar media vuelta y dejarlos tranquilos.
Si tu pareja no está interesada en esa persona, se lo hará saber.
Otra posibilidad es que sea "débil". En ese caso, deberás decidir si convivir con la cornamenta o terminar. Todo depende del contrato que mantengas con esa persona y tus límites morales en la relación personal con tu pareja.