No tengo ansiedad, los trayectos son de dos horas y media y cuando cruzaba el charco tampoco me ponía especialmente nervioso. Es curioso pero la gente, sin ansiedad, normalmente dice que lo pasa mal o un poco al despegar y aterrizar. A mí al contrario, son los momentos que más me gustan, son como una atracción. Yo por ansiedad no, bueno una vez sí pero porque tenía un familiar enfermo en Barcelona al que tenía que ir a ver y no quería que muriese, lo que sí recuerdo son un par de casos en los que lo pasé mal pero no por volar en si.
Una de las veces que crucé el charco, se sentó a mi lado una anciana que no paraba de querer hablar conmigo (hablamos una hora o algo así tranquilamente), incluso le dije que iba a leer un poco y no paró, dije que iba a dormir un rato e igual. Al final, llamé a una azafata para que me cambiase de sitio, no había asientos libres y mandó callar a la abuela. A parte, es que la mujer hablaba y decía lo mismo, era una mujer entrada en años y no estaba bien. Tremendo. Más de ocho horas al lado de esa mujer, eso no lo olvidaré en la vida. Yo ansiedad no tenía pero un dolor de cabeza y un cabreo monumental sí.
La otra fue cuando cojí una vez el avión Londres - Barcelona y se sentó a mi lado una chica jovencita que tenía pánico a volar. No se quejaba, no daba por culo, pero era verle la cara y cómo cojía las cosas con el tembleque y la verdad es que sufrí. Pensaba que la adrenalina pararía un poco pero lo hacia de modo compulsivo, incluso llegó a estar un rato con un tic sonoro que era como un carraspeo. Pasó casi una hora creo, le pregunté si se le había pasado un poco, me dijo que lo estaba pasando fatal pero que tuvo que ir a ver a una amiga y mientras me explicaba lo que hizo en Londres se fue relajando. Ella no lo notó o vió pero yo sí. El rostro le había cambiado a más relajado y normal, el carraspeo se había ido bastante e incluso sonreía al explicar su periplo en Londres y tal. Estuvo bien ayudarla, pero qué mala primera hora pasé. Una buena chica con un pánico fuerte a volar, estaba histérica cuando llegó y se sentó. La ayudé porque se exactamente lo que hay que hacer en estos casos.
Yo ansiedad o fobia a volar no, pero situaciones de angustia o malos ratos dentro de los aviones sí he tenido. De las peores la de la abuela esa y la hija o lo que fuera la que iba al lado era una asquerosa de flipar. Tendríais que haber visto la cara que puso cuando la azafata mandó callar a la abuela para que me dejara en paz. Yo ya no lo he hecho más. Abuelas o gente de cierta edad que están más aburridas de su vida que la ostia, dentro de un avión ya no les doy conversación al principio como aquella vez, no les hago caso o un mínimo de educación si me dicen algo y fuera.