Todas las PSPs son liberables, y todas ellas se pueden equipar con emuladores muy fácilmente, es cuestión de usar el autoliberador.
Mírate la que mejor esté y la que te guste más la pantalla (que yo debo ser ciega porque no me molesta, pero aquí han habido amplios debates sobre el ghosting de las pantallas de la PSP), porque ya no importa lo de placas malditas y demás: todas te servirán.