estoy condenado a morir,
por quererla demasiado,
por no olvidarla del todo,
por no tenerla a mi lado,
por besar otros labios,
por echarla de menos,
estoy condenado
y mi condena es vivir
para siempre amargado,
oculto tras una careta,
que oculta mi pasado,
que oculta las heridas,
que oculta todo el daño,
estoy condenado a morir,
por amar mas cada dia
a quien me hizo sufrir.