Leer el periódico es un acto muy saludable, y esta mañana me he enterado de unas cuantas cosas leyendo El País.
Empiezo por comentar un acto significativo: la violencia callejera, en Euskadi, ha presentado en febrero su índice más bajo en los últimos 4 años. Es algo de lo cual todos tenemos que felicitarnos los ciudadanos, aunque claro, hay determinados sectores de la política que pretenden salir a la primera plana cuando es la propia sociedad la que aisla el terrorismo y la violencia con su indiferencia y buen hacer.
Ciento cincuenta personas del mundo del periodismo (de diversos medios, tan dispares como Euskal Telebista -cadena pública vasca-, Radio Euskadi -radio pública vasca-, Radio popular, El Mundo, Gara, Deia, El Diario de Álava, Argia, Le Journal du Pays Basque) han firmado un manifiesto en contra del cierre del diario Euskaldunon Egunkaria. En el comunicado, afirman que "estas detenciones, registros, malos tratos, órdenes de encarcelación y fianzas y el cierre de Egunkaria han sido una agresión directa a los derechos fundamentales, la libertad de expresión, la libertad de información y la pluralidad lingüística y cultural"
¿Sabíais que, el 20 de setiembre de 2000, un grupo de intelectuales vascos, entre los que se encuentran Ana Arregi, Anjel Lertxundi o el escritor Bernardo Atxaga, firmaron un manifiesto contra eta llamado "Isiltasuna ez da artepe" (El silencio no es cobijo)? pues este manifiesto pacifista en contra de la barbarie terrorista podía ser leído en la edición digital de Egunkaria. Gustosamente os facilitaría el link, pero han cerrado el periódico por orden judicial, y no lo podréis leer.
Como dice Luisa Etxenike en un artículo de opinión en el cuadernillo central de El País edición Euskadi, "la sociedad vasca necesita empezar a interpretarse. Esto es: a leerse más allá de sus discursos y opiniones". Estas palabras me alientan a haber iniciado este post en pro de la libertad de expresión. Saludos.