No suelo considerar nada imposible, pero sí es cierto que he vivido cosas que consideraba poco probables. Lo que más me impacta son los cambios en la gente que me rodea. Personas encantadoras que cambian radicalmente y tienes que sacar de tu vida. O también lo contrario, personas con las que no tenías un trato especialmente profundo y que se vuelcan en ti en cuanto tienes un problema.
Destaco dos cambios dignos de mención. El de un amigo con el que me sentía fenomenal y conectaba como nunca lo había hecho con nadie. Nada me hacía pensar que un día dejaría de hablarme y desaparecería de mi vida sin una explicación. Pero mucho menos esperaba que años después se volvieran a cruzar nuestros caminos y que a día de hoy lo tendría a escasos metros de mí mientras escribo este mensaje.
También me sorprendió vivir de primera mano el finalizar una relación de manera idílica y conservar en mi ex a un amigo estupendo al que aprecio muchísimo. Pocas personas se han portado tan bien conmigo.