Todos los políticos tienen esta especie de "muletillas", y además no son espontáneas o naturales, sino que los gabinetes de asesores de márketing que tiene esta gente les indica perfectamente una serie de claves a la hora de hablar para dejar una buena impresión en el público.
En este caso, dos de esas muletillas de ZP son "Talante", "Diálogo" o "positivo", son como una especie de mensajes subliminales que dan en el conjunto de una exposición una imagen optimista y, sí, yo también voy a usar esa palabra, positiva cuando se trata de vender algo. A su vez, cuando hay que despotricar para desacreditar una idea contraria también existen esas muletillas (ahora no recuerdo ninguna de ZP, pero las tendrá, seguro). Así, repitiendo ciertas palabras hasta la saciedad es más fácil transmitir una sensación de confianza y veracidad.
Aznar por ejemplo, en su primera legislatura, cuando no tenía mayoría absoluta, usó y abusó de la palabra "diálogo". Casi en cada frase que soltaba, además de hablar catalán en la intimidad, estaba la palabra diálogo. Palabra que apenas aparecía en sus discursos durante su segundo mandato (la sustituyó por "legalidad") y a día de hoy, es un milagro oirla en boca de ningún cargo del PP por razones obvias. No tengo que recordar su famoso "váyase usted, señor González". Incluso alguna vez he llegado a pensar que su mítico "mire usted" también era teledirigido, muchas veces lo notaba un poco forzado en algunas frases y como que no salía demasiado natural.
Son trucos de expertos psicólogos que tratan de dar con auténticos slóganes disfrazados que susciten simpatía hacia quien las pone de moda o hacia sus tesis. Vendría a ser el "No es por no ir, que si hay que ir se va, pero ir pa ná..." de Cruz y Raya trasladado a la política.
Lo de que utilizar la palabra positivo como sinónimo de bueno es de analfabetos e incultos... pues me temo que en ese caso el 99´9% de la población lo somos.... sin querer ser negativo