El proceso de salida de Skype se ha completado por fin, y en eBay -que compró el servicio por 2.600 millones de dólares en 2005- han logrado deshacerse de un negocio que nunca les convenció, y no lo han hecho mal del todo. De hecho, según la valoración del acuerdo se ha situado en 2.750 millones de dólares, algo más de lo que eBay pagó por Skype en 2005. Ahora los fundadores de Skype vuelven a hacerse con la empresa que fundaron, aunque eBay sigue manteniendo parte del control.
Los creadores de este servicio de VoIP han recuperado por tanto el 14% de sus acciones, además de tener sus respectivos asientos garantizados en el consejo de dirección, mientras que eBay sigue manteniendo el 30% de las acciones, y el resto va a parar a inversores externos.