Cuando observabas las estrellas,
Intentaba traer el universo entero.
Entonces, supliqué al firmamento
…Si al menos pudiera ser cielo.
Cuando observabas la lluvia,
Yo te buscaba agitados mares.
Entonces, a un río imploré
…¡Alístame en tus gotas!
Cuando tus ojos brotaban fuego,
Yo veía furiosos ríos de lava.
Entonces, a un volcán pregunté
¿Me dejas ser llama?
Y cuando mirabas al suelo,
Veía sacudir violentos terremotos.
Entonces, al continente ordené
¡Petrifícame sin miedo!
Pero, cuando no quisiste querer
No supe qué ser, ni qué hacer
Salvo quitarme un trocito de mí
Para ser quien nunca fui
Porque ahora me miro, y no sé lo que soy,
Porque ser sin ti, es como ser sin ser
Porque ser sin querer, es ser sin quererlo
Y yo, ¡no quiero ser!
Gracias