Darfur: ¿Genocidio o negocio?

Darfur "se está muriendo" desde hace años. Hace ya más de una década que nos bombardean constantemente con la información de que en Darfur está acaeciendo un genocidio. Si realmente Darfur está muriendo, su agonía está siendo larguísima. Tan larga, que más pareciera sufrir un simple resfriado que estar desangrándose como afirman algunos.

El caso es que ayer estuve leyendo sobre los Fur, el pueblo indígena de Darfur (de ahí el nombre de la región, que significa "hogar de los Fur"). Obtuve datos muy interesantes acerca de este amable pueblo y sus costumbres:

-Su islamismo es verdaderamente fanático y atroz. A todo aquel que no es musulmán tienen por costumbre matarlo, en su forma más ritualizada ahorcándolo.
-Practican una opresión nefanda de la mujer. La mujer debe arrodillarse frente a un hombre al saludarlo, mientras que el hombre sólo debe disminuir su marcha. También practican la ablación del clítoris
-Tienen una modalidad de herencia particular por la que los hijos mayores van siendo expulsados de las posesiones paternas, que al final lógicamente sólo hereda el de menor edad entre ellos, el que menos ha contribuido y trabajado por la hacienda familiar. Ello se debe a que el padre, roñoso y avariento él como pocos, pretende perpetuarse en el control de la finca hasta que esté tan viejo que desfallezca de fuerzas, y sus hijos adultos suponen una suerte de "amenaza" a este poder autocrático.
-Mantienen la costumbre de lapidar a todo aquel que cometa lo que ellos denominan "crímenes sexuales". Entre estos se hallan, por supuesto, el adulterio y la homosexualidad. También tienen el agradable hábito de cortar las extremidades de los ladrones, y si los afganos solían cortar las manos de los ladrones, esta gente a menudo decide dejar rengo al ladrón para que no pueda huir aprisa cuando decida cometer otro latrocinio. Muy humanitario todo.
-Se hallan bajo el control de los ancianos de las aldeas, que son elegidos únicamente sobre la base de su edad. Al parecer, un anciano senil de ochenta años es la persona más idónea para manejar los asuntos políticos según su punto de vista. Estos son fanáticamente tradicionalistas y suscriben todas las costumbres anteriores, por muy deplorables que sean bajo cualquier código ético humano o divino.

La verdad, ayer me hirvió la sangre viendo a quiénes estábamos ayudando desde Occidente con millones de euros anuales. Y, por supuesto, empecé a dudar de la inocencia de los Fur en el conflicto de Darfur, pues la verdad es que cuesta creer que semejante banda de indeseables pueda ser inocente de algo. He aquí el "sorprendente" descubrimiento: en Darfur hay petróleo, muchísimo petróleo. Cantidades ingentes de petróleo. Y dicen las malas lenguas que Sudán se resiste a otorgar a Estados Unidos el monopolio de dicho petróleo y que ello es causa de que el gigante norteamericano esté brindando apoyo masivo e incondicional a los Fur, bajo el manto, por supuesto, de la "ayuda humanitaria", auténtica tapadera para financiar a los grupos armados Fur que se dedican a luchar contra el gobierno de Sudán y, de paso, a cometer crímenes de toda laya que ni la prensa ni los gobiernos de Occidente se molestan en reportar.

Es fácil creer en teorías conspiranoicas sobre la realidad, pero no sería la primera vez que la CIA se dedica a entregar armas y dinero a la peor escoria de un país para que se rebele contra un gobierno opuesto a los intereses de Norteamérica. Lo hacen en Indochina, por ejemplo: el llamado "Triángulo de oro" es la zona de mayor conflictividad del planeta, lugar por donde transitan múltiples narcóticos, especialmente opio, amén de armas, prostitutas que son enviadas a trabajar en condiciones de esclavitud en los burdeles de las ciudades del sur de China en creciente ebullición, niños que van a parar a las minas de las montañas de la china Yunán como mano de obra esclava, partidas de perros como la que recientemente capturó en Tailandia la policia ante el pasmo y la indignación internacional, y en definitiva todo tipo de mercancía inmunda, sea animal, material o humana. Pues bien, los pueblos de esa zona, particularmente los del norte de Birmania, son financiados por Estados Unidos para que se rebelen contra el gobierno de la "opresora" Myanmar. Dichas mal llamadas "culturas" ya las describen antiguas crónicas chinas como aberrantes. Afirman los cronistas chinos que tenían por costumbre asaltar y descuartizar a los comerciantes chinos que transitaban "al oeste de Tonkín y al sur de Guangzhou" (para el lego en geografía, al oeste de Vietnam y al sur de China, o más o menos lo que viene a ser el norte de Birmania, Tailandia y Laos), y que practicaban el canibalismo contra sus propios hijos. A esa gente es a la que ahora la CIA financia para que luche contra la malvada dictadura birmana, que goza del apoyo de China. Tal parece ser el procedimiento de los EEUU: hallar a grupos de salvajes inmersos aún en la Edad de Piedra y darles granadas y fusiles para que se subleven contra quienes se oponen a sus intereses.

Y cuando no pueden sublevar a etnias, apoyan a lo más bárbaro del seno de una sociedad para que les haga el trabajo. Lo estamos viendo en Siria: recientemente saltó a los medios de todo el mundo la noticia de que algunos "rebeldes" se dedicaban a arrancar el corazón y las vísceras de los soldados del ejército sirio. Y lo peor de todo es que ejecutan todos estos planes con la mayor de las irresponsabilidades, puesto que el destino tanto de una Siria islámica como de un Fur independiente será el mismo: convertirse en un nido de terroristas integristas que disponen de plenitud de recursos y armamento para atentar contra vidas humanas en EEUU y Europa.

Recuerdo las palabras de Sukarno: "váyanse al cuerno con su ayuda" y cómo en 1964, poco después, fue desplazado del poder de Indonesia por un golpe de Estado que aupó al poder al lacayo Suharto, el autor de la matanza de medio millón de chinos y títere sanguinario de los servicios secretos nortamericanos. Las ONGs, el USAID y otras agencias "humanitarias" han sido reiteradamente acusadas de usar la excusa de la ayuda internacional para llevar el caos al estilo de vida tradicional de las tribus africanas, financiar a todo tipo de criminales, enriquecerse ellos mismos y convertir a las naciones del Tercer Mundo en dependientes de su "ayuda", con todo lo que ello conlleva a efectos políticos y económicos.

¿Qué pensáis de todo esto? ¿Pensáis, como lo pienso yo, que el "genocidio" de Darfur es una tapadera mal disimulada para financiar a grupos de criminales que ayuden a los yanquis a hacerse con el control político de la región con el objetivo de apropiarse de todo su petróleo?