[erick] escribió:Seguramente te cueste una pasta ¿tu padre es coleccionista o es un capricho? Si no es coleccionista a lo mejor prefiere comprarse toda la discografía de bowie en CD
Pues es coleccionista, y madre mía que coleccionista...
13.000 discos aproximadamente
¿Peliculas? Tengo que preguntarle cuantas tiene (porque lo tiene todo en una base de datos acojonante) pero lleva coleccionando desde el VHS (ya no tiene), y actualmente conserva desde el Laser Disc en adelante y tiene algunas cosas verdaderamente sorprendentes como la coleccion de Star wars en laser disc en una edicion con una presentación que deja pasmado (las cajas, fotos...)
Creo que me dijo el otro día que estaba en nueve mil y pico peliculas.
Y además, es coleccionista puro y duro, es decir el 100% original.
...yo le digo...¿pero no es mas cómodo tener un ordenador en red con...yo que sé 20 teras de almacenamiento y tienes todo grabado ahí, y con un media center lo reproduces?
Y me dice que a él le gusta tener el disco físico, la carátula, anotarlo en la base de datos, guardarlo en un lugar específico para luego encontrarlo facilmente...
Un autentico CRACK, desde aquí un saludo a todos los coleccionistas porque aunque no seguiré el mismo camino he de reconocer que me parece una actitud muy romántica, es como decía el otro día Perez Reverte:
"Lo que está claro es que al joven le interesa mucho lo que lee, pues pasa las páginas con la decisión del lector seguro de sí; y cuando levanta la vista sostiene el volumen con ese tacto familiar, confianzudo, de quien siente con un libro en las manos el mismo consuelo, o confianza, que un pistolero al sopesar un revólver con seis balas en el tambor. Mucho se equivocan, pienso una vez más, quienes afirman que una tableta electrónica borrará el libro de papel de las necesidades humanas. Porque un libro no sirve sólo para leer. Sirve también para que su peso tranquilice las manos lectoras, para subrayar y ajar sus páginas con el uso, para regalar el ejemplar leído a personas a las que quieres. Para ver amarillear sus páginas con los años sobre los viejos subrayados que hiciste cuando eras distinto a quien ahora eres. Para decorar –no hay cuadro ni objeto comparable en belleza– una habitación o una casa. Para amueblar una vida."Grande Perez Reverte, inmenso mi padre.
Un saludo.