Yo creo que, hoy por hoy, el sector de la construcción es el que más urge reactivar. Pero con una reactivación racional, no con medidas chorras. No olvidemos que es el sector que ha sufrido más la crisis, que más parados ha provocado. Parados, en muchos casos, de difícil reinserción laboral en otros sectores productivos.
El estado debería, en mi opinión, incentivar una reconversión de la construcción. El llamado plan FEIL es una buena iniciativa. Hay que seguir invirtiendo en obra pública. No obstante debería incentivarse, fiscalmente, la "construcción ecológica". Con importantes deducciones en la restauración de inmbuebles, en el esponjamiento de zonas urbanas saturadas, etc
Politicas valientes, que no siempre redundan un beneficio para el contribuyente llano.
Lo que oigo y leo es propio de un Gobierno inepto, inútil, zafio y desvergonzado.