Los juegos olímpicos sólo se deberían celebrar en países bondadosos que fueran incapaces de invadir a otros o matar a ciudadanos inocentes en el exterior, y que respeten los derechos humanos y las leyes internacionales. Como por ejemplo, EEUU.
Ahora en serio, el boicot a los juegos de Moscú fue vergonzoso. Ver cómo medio mundo se plegaba a las exigencias de la primera potencia fue la prueba de que casi ningún país es independiente, sino que forzosamente han de seguir la corriente. Esperemos que no ocurra lo mismo con China.
Separemos el deporte de la política. Sabemos perfectamente que los EEUU tampoco son unos santos. Sin embargo ningún país "decente" se atrevería a boicotear unos juegos allí.
Creo que hay que ser ecuánimes.