La edición PC de
La Tierra-Media: Sombras de Mordor ha llegado acompañada de un
pack opcional de texturas HD que promete la mejor experiencia gráfica entre todas las plataformas. Pero eso sí, la aplicación del DLC de 3,7 GB conlleva que el título basado en el universo Tolkien dispare sus requisitos hasta nada menos que 8 GB de RAM y una GPU de 6 GB de VRAM.
Dado que llegar a esta configuración está al alcance de muy pocos, los chicos de
Digital Foundry han medido el verdadero impacto del
pack de texturas comparándolo con otros ajustes y con la versión de PS4, que presenta un aspecto homólogo al PC en Alto. El análisis concluye que "en su mayor parte, los ajustes en Alto (que ya de por sí presentan requisitos de RAM significativos) ofrecen la mayor parte de la experiencia Ultra".
No obstante, Digital Foundry señala mejoras en la definición de algunos escenarios y de ciertos planos cortos de personajes. Debido a que la diferencia no es inmediatamente notable, la revista Eurogamer ha preguntado al diseñador jefe de Sombras de Mordor, Bob Roberts, sobre el porqué de un parche con requisitos tan ostentosos.
"Para hacer el mundo rico y detallado, especialmente los personajes […] nuestros artistas están haciendo cosas con una fidelidad escandalosa", comenta el diseñador de Monolith Productions. "Están en PCs monstruosos haciendo cosas a la mayor calidad posible y después encuentran formas de optimizarlo para que quepa en la
next-gen, para que quepa en PC en Alto".
"Así que obviamente va a haber una barrera debido a que nuestros PCs monstruosos de desarrollo lo van a correr bien, pero ¿por qué no dar la opción de que la gente le de caña? Tiene sentido sacarlo al mundo. Nosotros lo tenemos, lo construimos de manera que se vea tan bien como sea posible. Tú también deberías poder hacerlo, ¿no?".
Ya sin texturas Ultra de por medio, Gamespot también ha realizado una comparación en vídeo de las versiones para PS4, Xbox One y PC de Sombras de Mordor. Recientemente, Roberts explicaba a
IGN que la versión del título para la consola de Microsoft ha aprovechado el 10% de CPU que ha dejado libre Kinect para mejorar la velocidad de cuadros.