Respecto a lo que preguntas, ningún médico va a practicarle de primeras un aborto a una niña que ha dicho que no quiere. En caso de discrepancia entre lo que dice la menor y lo que dicen los padres, el médico probablemente derive el caso a un órgano judicial que sea el que decida. Aunque en principio, al ser menor de edad, tiene mayor importancia lo que dicen los padres, si la niña muestra la suficiente madurez como para decidir por ella misma, el juez dejará que sea ella la que tome la decisión. Esto se cumple tanto si la niña quiera abortar y los padres no, como si es el caso contrario. Una vez el juez haya tomado la decisión, el médico obrará en consecuencia.
Y ya hablando en el tema personal, deja a la niña tranquila y no quieras comerle TÚ la cabeza. Los padres probablemente sepan mejor que tú, porque tienen más vida, lo mejor para la hija. No quieras transmitirle una falsa sensación de madurez porque tú tengas unas ideas religiosas determinadas y quieras fastidiarle la vida con tal de actuar en consecuencia a ellas. Un aborto es una decisión MUY SERIA que probablemente le deje secuelas psicológicas toda su vida, no quieras complicarle aún más las cosas.