Buenas tardes.
Hace 10 días rescatamos a un bodeguero de la perrera, desde el primer momento, Fito, así se llama, se ha mostrado muy cariñoso y juguetón. Siempre viene hacia nosotros y se ve que esta deseando caricias y juego. El caso es que también tenemos una perra a la que hemos operado hace nada, de urgencia por píometra. La cosa es que mientras se castraba a uno y se operaba a la otra no dejábamos que estuvieran juntos sin nuestra observación, nuestra casa tiene un amplio jardín y el ha estado fuera todo estos días, durmiendo en la entradita que es un miniporche, resguardado del frio (que no ha hecho porque estamos en verano) el caso es que desde el primer día siempre que hemos intentado que el perro entre en casa, no ha querido, antes no subía ni los 3 escalones de la entrada, ahora si los sube pero o no quiere entrar o entra y sale de momento. Hemos intentado que coja confianza con entrar poco a poco, dos veces que ha entrado, una vez dentro se ha mostrado tranquilo incluso ha dormido a mi lado bastante rato, pero en cuanto ve la puerta abierta, sale, no es que lo haga a toda velocidad, pero aun asi, sale si o si. He probado a dejar la puerta abierta, a llamarlo desde dentro, a darle alguna chuche... Y lo máximo que entra por si mismo son 2 metros. Si el prefiere estar fuera yo no tengo problema pero dentro de nada llegara el frío y preferiría que durmiese dentro aunque luego estuviese todo el día fuera si así lo quisiera. Con nuestra perra lo hacemos así, si le apetece estar fuera,la dejamos fuera a veces con nosotros y a veces sola y cuando abrimos y se mete dentro de casa pues la dejamos igual. Es lo que querríamos hacer con Fito pero a día de hoy no hay mucho avance que digamos.
Agradecería toda la información que pudierais darme tanto de por que lo hace como de como puedo solucionar este "problema".
Edito para decir que tiene 1 año y 4 meses y que ha estado 5 meses en la perrera.