En mi caso, el principal problema que tengo con las copias digitales es en una posible reventa. Intento reutilizar todo y cuando no me sirve lo transformo en algo que sí me sirva, en este sentido tengo pensado que en el futuro cuando haya exprimido la 3DS me desprenderé de ella para engancharme a lo que vaya saliendo. De todos modos si traspaso la cuenta no tendré problema.
Hay un problema con los videojuegos y es que se retiran a velocidades vertiginosas. Cuesta ya encontrar copias físicas de Bravely Default, estrella de las Navidades pasadas. Como decían en Sega "enterramos lo viejo para dar paso a lo nuevo" jejeje. Además las tiendas no tienen stock infinito, ni siquiera en su almacén raíz. Por lo que los juegos hay que comprarlos al vuelo, al poco de salir, tragándonos con ello el precio sin rebajar. La copia digital mata los dos problemas de un plumazo al proporcionar una copia años después de que se haya retirado del mercado físico y en ocasiones con rebajas muy interesantes.
Yo compré en descarga Virtue's Last Reward, juego de baja popularidad por estos lares debido a su naturaleza, además es un juego de 2012, con lo que era imposible encontrarlo en España, tenía que pedirlo a Inglaterra. Al final me cansé y eché mano a unas tarjetas de descarga de Nintendo. En este caso es un juego de jugar una vez, con escasa rejugabilidad, la historia es la que es y se puede consultar en una magnífica wiki que hay por ahí, por lo que es perfecto para ser descargado. No creo que lo eche de menos con el paso de los años, y no vuelvo a resolver todas las habitaciones ni loco. No es como un Baldur's Gate que aún sigo jugando después de 15 años.
El otro juego que tengo en la SD es Conception II, que ha llegado de chiripa hasta aquí y que sólo se vende en copia digital (los juegos "weaboo" lo tienen bastante difícil para cruzar las fronteras, cosa absurda ya que constituyen una nutrida parte del catálogo de las portátiles. Pero según Iwata, los frikis están todos en Japón, en fin). No me lleva entusiasmando mucho pero claro, es la única forma de echarle mano al juego.
Para todo lo demás, soy firme defensor del formato físico, que por algo se resiste a desaparecer.