En teoría y si no me equivoco, que creo que no, el software ya viene configurado con unos valores seguros de OC para la tarjeta gráfica, eso no quiere decir que si subes los valores a tope tu tarjeta lo soporte, que ni de coña, pero tampoco vas a estropearla más allá de tener que reiniciar el PC, o que se cuelgue el juego, o aplicación. Hay otra aplicación de Asus exclusiva para hacer OC a la tarjeta gráfica que se llama GPU Tweak II, yo la utilizo y por ejemplo no te deja subir el voltaje a más de 120%, por defecto 100%, o el reloj a más de 134 Mhz extras, que luego en mi caso tampoco soporta subirlo más de 90 Mhz sin dejar de ser estable (Asus 1080 TI OC). Si la aplicación permitiera subir de golpe el voltaje de la tarjeta a un 400%, pues imagino que le daría un hamacuco antes de poder apagarse y tal vez sí que la palmaría.
Otra cosa es que tener puesto un overclocking agresivo provocando temperaturas altas pueda ocasionar que se acorte la vida de la tarjeta en comparación a utilizarla cómo viene por defecto, pero tampoco creo que sea nada preocupante, realmente no encuentro ningún estudio real que hable sobre el tiempo que dura una tarjeta gráfica de serie vs OC, luego opino que incluso importa por ejemplo más la ventilación general de la caja, la suerte que tengas con esa tarjeta (no todos los chips salen igual de buenos), calidad de la fuente de alimentación, o las horas que pases jugando, que no el overclocking, y yo creo que en la gran mayoría de casos al final la tarjeta gráfica termina antes jubilada por desfasada que no por qué haya petado a causa de unas condiciones de uso de OC normales.
Mientras el OC sea estable después de pasar tests de estrés (en plan 3DMark), yo creo que no hay mucho más de qué preocuparse, si no se cuelga, y no aparecen artefactos en pantalla, luego al jugar no será tan exigente cómo estos tests que ponen las tarjetas al límite y siempre tendrás ese margen. Está bien mirar que las temperaturas no se disparen, así muy en general un tope máximo de 80º sería lo recomendable, que no ideal, aunque también hay que mirar a qué temperaturas empieza a bajar rendimiento (throttling), esto es una protección que llevan la mayoría de tarjetas de hoy en día para bajar temperaturas, puedes verlo con algún programa de monitorización (el GPU Tweak II trae uno), luego las tarjetas gráficas tienen otra protección extra que apagarían el equipo al alcanzar una temperaturas peligrosa, normalmente algo por encima de los 100º, aunque también depende de cada modelo y marca.
Cómo opinión personal creo que lo que debemos preguntarnos es si merece la pena hacer el OC, pues a fin de cuentas tampoco vas a ganar más que unos pocos FPS, entonces si ya juegas normalmente a 60 FPS estables, para qué vas a ponerlo, lo mismo si juegas sin limitar el framerate que yo al menos no noto diferencia entre jugar a 120 o 130 FPS, pero si por ejemplo tienes un juego que se te queda cerca de los 30, o 60 FPS con la calidad gráfica deseada, no utilizas G-Sync, y sufres pequeñas bajadas que provocan tirones, ahí es donde creo que puede ser interesante de verdad, más allá de ver hasta donde llega el equipo. Hacer OC solo es un pequeño último estirón.