Al final, como en muchas cosas, te limita el dispositivo más lento: Si tienes USB3.0 en el PC, lo conectas a un lector de tarjetas USB3.0 pero la velocidad de escritura de tu tarjeta es 10MB/s, pues irá a 10MB/s. También podrías tener una tarjeta rápida (60MB/s), el mismo lector, pero sólo un puerto USB2.0, y la velocidad te la limitaría en este caso el puerto a unos 20MB/s... Si quieres la máxima velocidad, asegúrate de que la cadena de dispositivos que uses pueda mantenerla.