Hoy he recibido una psone que no sabía si funcionaba o no. La he probado y parecía que iba perfecta, con el pequeño inconveniente de que la lente hacía demasiado ruido al moverse, pero demasiado de verdad (no creí que una psone pudiera sonar así).
Horas más tarde de haberla probado me dio por poner el Tony Hawk´s para echar una partidilla, y en la segunda pantalla empezaron a sonar ruidos anormales en la consola, como si la lente saltara, '¡plas plas!', casi como si dijera 'lo siento, hasta aquí he llegado'.
Como hace unos días me cargué la faja de datos que conecta la lente a la placa de una psone, pensé que este podría ser un buen mes de estropicios y decidí desmontar la consola que me llegó hoy... pues pa ver si la mataba también, no sé. Abrí la consola y quité la parte superior del mecanismo que envuelve la lente (el plástico gris que tiene dos tornillos y dos pestañas) y me encontré unos engranajes que hacen se mueva. Había una pasta que estaba en buen estado y un poco de porquería en los dientes de los engranajes. Quité la porquería y, no sé, se me ocurrió que quizás el ruido tenía que ver con esos engranajes, así que busqué un tubo de vaselina pura y le eché un pegotillo. Cerré la lente, armé la consola y la arranqué. Jugué al Tony Hawk´s y al No fear y no se escuchó el '¡plas plas!' ni una vez, es más, la lente, según iba jugando, se escuchaba cada vez menos su desplazamiento, aunque no ha llegado a escucharse como la lente de una consola sana.
Mi pregunta: ¿es bueno echarle vaselina al mecanismo que hace que la lente se mueva o es una tontería como una casa de grande?, es decir, igual creo que he reparado la consola y he evitado que la lente reviente y, sin embargo, es una falsa ilusión y el próximo día que la encienda la lente va a saltar y a sonar como una carraca de nuevo.
¿Algún consejo sobre mantenimiento de la lente?