Earths36 escribió:Mi firma encaja bien aqui, sobra gente, para mi, a ojo de buen cubero, sobran 3.000 millones, pero ya no es eso, sino que encima vamos para arriba, estas cosas la gente no las piensa, e incluso hay gente que dice que no es un problema(obviamente no razona), y mientras debaten entre comunismo y capitalismo, o de si tal y cual, pero de mientras procrean como conejos. Al final la 3GM se tendra que inventar para fumigar ciudades, como Siria, o un caso demostrado, como EEUU en Vietnam.
+1, pero no pasara tal como lo pintas, el día que la super población deje de ser rentable para los lobbys que especulan con la comida, los biocombustibles, las guerras, las tierras, y las enfermedades, cuando ese día suceda, entonces se planteara la erradicación de una parte del planeta, pero dudo que eso suceda tan fácil y sin ser más complejo de lo que parece, si no se ha controlado la súper población es porque cientos de empresas viven de las necesidades diarias de las personas, es así de simple, cuanto mayor mano de obra haya, más barato será el capitalismo, más fácil será adormecernos bajo multitud de distracciones.
Pero hoy en día, en el mundo occidental y desarrollado, solo tienen casa los especuladores y los ricos, y la generación de nuestros padres para atrás, esto ha pasado de ser una guerra de clases a una guerra de generaciones, es una pena que bajo la ignorancia que nos incitan, unos pocos vivan como autenticas reinas en un nido de cucarachas. Este tema ya está más que estudiado, el futuro está escrito, y lo único que podría cambiarlo seriamos la mayoría del pueblo llano de todos los continentes, no somos más que los conejillos de indias de una casta casposa y alejada de la realidad.
Donde la palabra dinero es la única que genera propósitos acertados, a cada segundo nos lo venden así, el dinero, el dinero y el dinero, es lo que hará de ti una persona que valga algo, solo hay que encender la tele, salir a la calle, e incluso en el instituto, en el trabajo, en cualquier ámbito de la vida, estamos contaminados por esta máxima creada del mundo capitalista, triste que una especie tan brillante viva en la inmundicia como insectos.