18 de 3.000, 25 personas... la noticia es buena. La frase, también. Lo malo es que después de tanto tiempo a gastos pagados -y con la posibilidad de sacarse un título universitario desde la cárcel como todos sus amigos sin mover el puto rabo-, ahora le tocará buscarse un oficio de nuevo. Pero no os preocupéis, porque seguro que en su anterior "empresa" aún le guardan el puesto, en 18 años no se le habrá enfriado ni la silla. Pues nada, de cojones. A ver cuándo sale el otro, que tendrán ganas de verse.
A los que estudiáis Derecho y tenéis principios morales: ¿estas cosas no os tocan un poco los huevos?