Fuegos de artificio. La experiencia del directo nada tiene que ver con hologramas y tonterías posmodernas. El valor de un concierto reside en otras cosas desde luego no imitables vía mediums digitales. Suscribo las palabras de resakosix. Yo, por ejemplo, no he podido ver nunca a los Big Star de Alex Chilton en directo. Pero el homenaje que se le va a hacer en el Primavera Sound este año, con miembros del grupo original y con fans del calibre de Mike Mills (REM), Norman Blake (Teenage Fanclub) o Ira Kaplan (Yo La Tengo), me resulta una idea atractiva. Desde luego mucho mejor que ver una puñetera proyección.