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El comisario jubilado de la Policía Nacional Jesús Figón aguarda a ser juzgado en Brasil por el asesinato de su mujer trabajando como “consejero asesor” en la Embajada española. Este es el cargo que el Gobierno ha elegido para que Figón continúe acreditado como personal diplomático y conserve la inviolabilidad y parte de la inmunidad del cargo después de haberse jubilado de la Policía Nacional el 23 de enero pasado, revelaron a eldiario.es fuentes policiales y confirmaron oficialmente los ministerios de Interior y Asuntos Exteriores.
Jesús Figón se entregó a la policía local de Vitoria, capital del Estado de Espírito Santo, el 12 de mayo de 2015. Ante los agentes confesó que había matado a su esposa en el transcurso de una discusión. Rosemary Justino Lopes, de nacionalidad brasileña, falleció por varias heridas de arma blanca. Al día siguiente, el ministro Margallo dijo que España renunciaría a la inmunidad diplomática de la que gozaba Figón si se confirmaba que la investigación era por un crimen machista. La inmunidad, dijo el canciller español, “en ningún caso puede servir de coartada en hechos tan deleznables como los que se están investigando allí”.
La realidad es que Figón ni siquiera fue apartado de su puesto como máximo representante del Ministerio del Interior en Brasil y que España solo renunció a la “inmunidad de jurisdicción”, por lo que el país sudamericano se está haciendo cargo de la investigación y celebrará el juicio. Al mantener la “inmunidad de ejecución”, el policía será trasladado a España en cuanto haya una sentencia para cumplir la pena. En caso de ser condenado, Figón no llegará a pisar una cárcel brasileña.
Tras el presunto asesinato machista, Jesús Figón continuó siendo el consejero de Interior de la Embajada española en Brasil y cobrando su sueldo íntegro, incluso cuando la Fiscalía del país presentó la acusación formal por homicidio cuatro meses después, en septiembre de 2015.
Pero el 23 de enero de este año, el comisario cumplió 65 años y se jubiló. Figón se veía obligado a dejar el servicio activo de la Policía y el cargo de consejero de Interior en la embajada. El comisario no podía seguir acreditado como personal diplomático en el país donde presuntamente mató a su mujer. Fue entonces cuando el departamento que dirige Jorge Fernández Díaz propuso nombrarle “consejero asesor” de la Embajada en materia de Interior. Exteriores aceptó. De este modo, Figón mantenía su condición de “agente diplomático”.