* El Plan Presupuestario remitido a la UE prevé que una parte de esos nuevos recortes se obtenga a través de más tasas e impuestos: "Por el lado de los ingresos en CCAA, existe margen todavía para agotar la capacidad normativa actual".
El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, durante una intervención en el Fora ANFAC.Nueva sorpresa en la política de austeridad en la que está embarcado el Gobierno: según se desprende del Plan Presupuestario remitido a la Unión Europea (UE), el Ejecutivo de Rajoy obligará a las Comunidades Autónomas a dar un nuevo tijeretazo a las cuentas públicas de 2014 y 2015, el de este último año imprevisto.
La cuantía del nuevo hachazo se cifra en 8.000 millones de euros en los próximos dos años, 4.068 millones en 2014 y otros 4.000 en 2015. Los recortes del año 2014 estaban más o menos previstos:
el borrador de los Presupuestos fue presentado el pasado 30 de septiembre. Lo que no entraba, a priori, en los cálculos de nadie, son los ajustes previstos para 2015. Así lo confirma el documento remitido a Bruselas, donde se puede leer: "Con arreglo a los criterios señalados para el ejercicio 2014, en 2015, se prevé que el importe de las medidas a adoptar ascienda a más de 4.000 millones de euros".
El informe del Gobierno explica que aún se está recabando información sobre los presupuestos y planes de ajuste de las comunidades autónomas, pero que las líneas generales llevan a calcular que durante 2014 se adoptarán medidas por importe de 4.068 millones. De ese total, el de 2014, unos 1.927 millones se obtendrían directamente de aplicar la tijera, mientras que otros 2.142 vendrían de una previsible subida de impuestos. Para 2015, es previsible que la distribución de los recortes tenga una estructura parecida, aunque el Gobierno aún no lo ha precisado.
Así se deduce de lo contemplado en el documento: "Por el lado de los ingresos en CCAA, existe margen todavía para agotar la capacidad normativa actual en impuestos propios. La estimación para los años siguientes asciende a 2.000 millones adicionales anuales, 2014 y 2015, que se basa en continuar con la tendencia actual de aumento de la capacidad normativa en tributos cedidos y el margen existente en tributos propios, en particular los medioambientales".
En lo que respecta a los gastos se prevé que las autonomías adopten medidas encaminadas la mayoría a un mayor control de los gastos corrientes en bienes y servicios, gracias a la entrada en funcionamiento del sistema de compras centralizado y al ahorro en gastos de funcionamiento.
El ministerio de Hacienda se apresuró a aclarar que estos nuevos ajustes "no responden a medidas adicionales, sino al cálculo del impacto económica de las que ya están en marcha o pendientes de aprobación".