El jardín de mi vida

Yo no creo que esté incompleto, dudo mucho que puedas añadir algo más, creo que si lo hicieras quedaría excesivamente cargado. Para mi esta bien tal y como está. Al tener el mismo principio que fin, parece tener un caracter cíclico, como de lamento, no se bien como definirlo, pero creo que el efecto que pretendes está bastante logrado.
En cuanto a las metáforas, me encanta sobre todo cuando haces referencia a los árboles (almendros, sauces, cerezos,...), gracias a ellos muestras el transfondo de un pasado perecedero, marchito, que se apaga, pero que al final, como todo año tiene su primavera; "volverán las aves riendo" , todo florecerá de nuevo y el tiempo siempre cura las heridas, ¿verdad?.

Quería dejar más claro que es el transcurso de las estaciones, marcando más el invierno y el verano, que parece que solo hay otoño y primavera

Pondré tambien la otra versión cuando esté acabada, a ver cual gusta más...

Salu2

PD: Sólo el tiempo cura las heridas, cierto

La otra versión. En esta creo que se ve más claramente el paso de las estaciones Comentad, por favor, para saber cual está mejor... Y cualquier fallo, detalle que no os guste, etc, exponedlo.
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Rosas florecen cada día,
hojas caen al suelo
en el jardín de mi vida.

Retorcidas ramas de almendro
dan refugio y comida
a mis recuerdos.
Raíces soportan el peso
de mis flores tardías.
Las ramas acarician el cielo
robustas, decididas.

A la sombra de un cerezo
sonríen margaritas
repartiendo colores, aprecio
a todo aquel que las mira.
Sus pétalos, abriendo
deslumbran a negras espinas.
Amarillo pensamiento,
blanca flor de vida.

El Sol amanece contento
deslumbrando a las colinas.
Y alzando los dedos
acaricio golondrinas
jugando, surcando el cielo.
Se secan las espigas;
dorados en mi cuerpo.
Ya se hace largo el día,
ya siento calor en mi pecho.

Catigará a veces el viento
a las hojas. Las mentiras
tendrán que irse tan lejos
como puedan, ya perdidas.
Llegarán los malos tiempos,
llorarán sauces con ira,
pétalos, pereciendo
sembrarán esperanza florida.

Rugirán rayos, truenos,
oscuridad serán mis pupilas.
Todo lo cubrirá el tormento...
Pero quedarán semillas
enterradas, ocultas con tiento,
asustadas, escondidas.

Llegarán tiempos de riego,
plantarán mis manos vacías
los frutos del invierno.
Se abrirán las crisálidas,
volverán las aves riendo,
secará el Sol las lágrimas
del rocío como espejos.

Rosas florecen cada día,
hojas caen al suelo
en el jardín de mi vida.

Si es cierto, se nota mucho más el paso de las estaciones y no ha quedado nada mal, ni siquiera "cargado", como yo pensaba que quedaría. Mu bien Nylsa, al final conseguirás que me gusten las poesías!!. Je je.
Por cierto, lo de "Rugirán rayos, truenos, oscuridad serán mis pupilas", lo veo un poco penumbroso , prefiero: "Se abrirán las crisálidas, volverán las aves riendo, secará el Sol las lágrimas
del rocío como espejos ", ¡ese ultimo trozo es la leche!, que lejos queda el frío invierno cuando los rayos de sol derriten la nieve y las gotas de rocío se deslizan por lustres hojas para después difuminarse en el vacio. Pero lo cierto es que en el contraste está la gracia de esta poesía. No siempre los inviernos son tan frios, ni las primaveras tan benignas, pero por suerte, siempre, antes o temprano, llega el estío.

Un saludo

sencillamente, curradisimo me ha gustado mucho