Más que 'pitufeo' es el mamoneo que se trae esta gente. La figura jurídica del aforado está totalmente prostituida a día de hoy. Se creó en aras de preservar a los cargos públicos de calumnias que entorpecieran su labor pública dotándoles de ciertas garantías y privilegios procesales, pero a día de hoy no es más que un utilitarismo para inmunizarlos frente a posibles sanciones penales por las corruptelas cometidas. No saben ná, y lo mejor es que la triquiñulea se huele a millas de distancia.
El caloret!!