Para la mayoría de la gente,
NIO es una marca de automóviles totalmente desconocida. Hay motivos para ello. Concebida por la escudería eléctrica china NextEV (que participa activamente en la categoría
Formula E), este nuevo fabricante de coches eléctricos ha sido presentado hoy de manera oficial junto con su primer modelo, el EP9.
Pero así como otros fabricantes de vehículos eléctricos apuestan por la conducción autónoma y la autonomía, NextEV quiere situar a NIO como un constructor de vehículos de la más alta categoría. Prueba de ello es que su primer coche presume de ser el vehículo eléctrico más rápido del mundo.
El EP9 utiliza una configuración motriz muy diferente a la de otros deportivos eléctricos. En lugar de uno cuenta con cuatro motores y sus respectivos cambios de marchas para canalizar nada menos que un megavatio de potencia nominal (equivalente a unos 1.360 CV) y un par motor presumiblemente igual de exagerado a sus ruedas. El resultado es una capacidad de aceleración de 0 a 200 km/h en 7,1 segundos y una velocidad máxima de 313 km/h. Unas cifras que rivalizan con las de algunos de los superdeportivos con motor térmico más rápidos del mundo. Como referencia, el Bugatti Chiron acelera de 0 a 200 km/h en menos de 6,5 segundos.
Según señala NextEV, el NIO EP9 ya cuenta con dos récords en su haber al haber roto las marcas establecidas por otros vehículos eléctricos en el circuito Paul Ricard y el famoso Nordschliefe.
La autonomía es un punto interesante del EP9. A pesar de que ha sido diseñado en el túnel del viento con la clara intención de romper récords de velocidad, la duración de su batería es relativamente generosa en términos nominales. Al menos oficialmente su autonomía se cifra en 427 kilómetros de recorrido y se puede cargar en 45 minutos. El sistema de almacenamiento es además modular para facilitar la sustitución de las baterías. Son uno de los elementos más pesados de este deportivo fabricado en fibra de carbono, que tiene un peso declarado de 1.735 kg.
Si bien en estos momentos el EP9 no cuenta con un sistema de conducción autónoma, la compañía señala que el coche está diseñado para aceptar potencialmente la integración de este tipo de tecnologías.
Queda por ver si esta es solo una posibilidad o una meta real, puesto que según la revista británica
AutoExpress sólo serán fabricadas seis unidades a un coste de 1,2 millones de dólares para la empresa. Según la publicación, todos los coches ya han sido reservados por los fundadores de NextEV. Ya en 2017 NIO espera lanzar su primer modelo comercial, una berlina eléctrica que tendrá su bautismo en China.
Fuente: NIO