Hace unos meses Google enseñaba al mundo su propio
superordenador cuántico "D-Wave 2" desarrollado en colaboración con el fabricante canadiense D-Wave y la NASA. En aquella ocasión, los responsables del juguete de 15 millones de dólares reconocían no saber "cuáles son las preguntas que debemos hacerle a este ordenador", aunque vaticinaban grandes adelantos en el procesamiento de problemas de optimización.
Ahora, un estudio publicado en la revista
Science sugiere que la potencia del superordenador cuántico no ofrece ninguna mejora sobre la computación tradicional y cuestiona el mismo propósito del proyecto de Google. El análisis realizado por la Escuela Politécnica Federal de Zúrich no ha encontrado una diferencia significativa de procesado entre la máquina cuántica y un clúster de ordenadores binarios en propiedad de Microsoft Research.
En teoría, la capacidad de manejar más de dos valores en la unidad mínima del procesamiento cuántico (qbit) provoca una ventaja sobre los ordenadores tradicionales que aumenta a medida que el problema se hace más complejo. Esta propiedad se denomina "aceleración cuántica" y según los investigadores suizos no se presenta en el ordenador de Google, o bien lo hace de forma excesivamente sutil.
"Es difícil mostrar que la aceleración no se está produciendo", comenta el coautor de la publicación Matthias Troyer. "Pero si no encuentras la aceleración, no puedes demostrar que la máquina es mejor que un dispositivo clásico. […] Nosotros no hemos encontrado pruebas de la aceleración cuántica. Cuando examinamos todos los problemas, la máquina funcionaba igual que un ordenador convencional".
Pese al desalentador resultado, Troyer destaca que la tecnología novel del ordenador de Google ha sido capaz de aguantar el pulso a
chips con décadas de investigación a sus espaldas. Asimismo, el investigador explica que en determinados problemas la máquina cuántica consiguió multiplicar por cinco el rendimiento de los ordenadores convencionales, aunque en otros entregaba un rendimiento 100 veces más lento.
Por su parte, el director de desarrollo de negocio de D-Wave, Colin Williams, ha puesto en entredicho la relevancia del estudio publicado por Science, asegurando que "tienen que elegir problemas mucho más complicados". Del mismo modo, la compañía señala a otro trabajo realizado por la USC (
pdf) que asegura que la aceleración cuántica ya está presente en el dispositivo.