Lo que yo no entiendo es que hace asistiendo al funeral de un tio que se llevó bastante bien con el tio Paco, que se declaró juancarlista, y que cuando el campechano visitó Cuba, poco menos que le faltó besarle los pies.
Por cierto, que también era un gran amigo del supuesto señor X.
Y mira que el muy idiota podría haber volado con Iberia y no hubiera tenido ese problema, pero claro hubiese sido demasiado para su orgullo, pues nada, por gili****as.