Mientras intentaba deshacerme del maldito fideo enrrollado en mi pendiente, mis padres habían empezado a discutir entre ellos sobre lo que había hecho. Hm, extraño si señor, sobre todo si el que tenía el pendiente era yo, pero bueno, eso me dio un margen de error y un tiempo para escaparme... si conseguía deshacerme de aquel hilo asqueroso q no se deshacía.
- Todo esto es culpa tuya - dijo mi madre -. Siempre mimándolo y dejándole que haga locuras.
- ¿Y tú qué, cotorra? Nunca le has dedicado tiempo a nustro hijo pq estabas ocupada con tus amigas pajarracas que sólo saben criticar.
- No metas a mis pajarracas en esto - ugh, de lo que se entera uno.
- Ahora por tu culpa nuestro hijo se ha vuelto rebelde y...
- Eh eh eh, padad ed caddo - ahi intervine yo. Rebelde? Dios, a mis padres les pasa algo -. Do be he edho ed peddiente pod debeldia.
- Hijo, deja de escupir por favor.
- Tedgo ud fideo ed da dengua y un cadho hieddo q be la atdavieza ¬¬
- Vale vale, pero, si no lo haces por rebeldía, ¿pq lo has hecho? - uf, ahora como les contaba yo esto a mis padres? Aiii, pq tendré q hablar, con lo bien q estaba yo contando fideos....
- Hmmmmmmmmmmm pod.... pod..... Madia...
- ¿ESA? - dijo mi madre -. No me sirve de excusa jovencito. ¿Ahora q van a pensar mis pajarracas... esteeee mis amigas?
- Muérdaga - dijo mi padre a mi madre ( sí, así se llama, q pasa?) -. Déjanos a Manu y a mi solos.
- ¿Pq?
- Luego te contaré - y le guiñó un ojo. Mi madre en seguida se puso colorá y la cara le cambió.
- Me voy a poner cómoda. ¡Fiera! - por favor, q no sea lo q pienso..... Y se fue mi madre. Entonces mi padre me miró con cara de compasión y me salta con una paranoia mu grande.
- Verás hijo mío, el amor es una cosa muy bonita pero bla bla bla
Un momento. Para el carro. Aver. Analicemos la situación. Mi padre contento. Mi madre q se cambia y llama a mi padre tigre. Yo con un fideo en la boca. Esto no es normal. Encima mi padre va a echarme un sermón de cómo es el amor... Esto no puede ir a peor.
- bla bla bla bájate los pantalones y enséñamela.
- Vade....¡Qué? - he odio bien?
- Sí, quiero ver como está. Me dijo tu madre q parecía un ocho.
- Edte... papa, no cdeo q haga fadta... - dios no. Tengo un padre a lo American Pie.
- ¡Bájate los pantalones! - y vi por el rabillo del ojo como los criados salían horrorizados. Dios, esto no puede ser verdad.
- Vade.... - tragué saliva y me bajé los pantalones despacio. Luego los canloncillos y dejé mi costia al aire.
- Dios mio chaval, eres un superdotado... pero tu madre tiene razón ahora mismo eso es más una pera q un pepino.
- Papa ¬¬ - a ver q levante la mano el q le pase esto a menudo. Me subí los pantalones rápidamente y me los puse en su sitio.
- Tranquilo hijo, soy tu padre.
- Di,ya do te jode.
- Bueno espero q te reconcilies con María, pero mira, primero quiero enseñarte unas cosas - y sacó... no, ahi no... unas revistas de esas guarras... hm, q tia más buena... pero q digo. Son de mi padre.
- Papá....
- Sí hijo, son musas. Verás, es q para hacerlo con tu madre primero debo de concentrarme - ejem...-. Pero bueno, eso no viene a cuento. Verás tu pene, cuando se ponga recto debes de introducirlo exáctamente por aquí y..
- Papá... ehm... este.... lo dejamos?
- No, debes de aprender bien. Entonces debes de tener cuidado con....
- Papa, pod favod.... - dios mio, q esto acabe.
- Ah, es verdad, el chicle.... - chicle??? ay no, acaba de sacar un preservativo- Aver, bájate otra vez los pantalones y te enseño a ponertelo.
Prefiero no describir lo demás. Fue demasiado... demigrante.....
Tengo un padre a lo American Pie
-------------------------------------------------------------------------------------
a ver q os parece.