Soul Sacrifice es un excelente juego pero no se compara al magistral y maravilloso Gravity Rush de Keichiro Toyama. Es que si este juego no se considera arte entonces no se que sea. Lo tiene todo: una de las protagonistas más carismáticas que eh tenido oportunidad de controlar, historia interesante, mundo abierto enooorme con una cuidad hecha casi artesanalmente, jugabilidad adictiva, etc, etc, etc.
Vaya, es que si Sony no saca una segunda, tercera o cuarta parte de este juego es para matarlos, porque me atrevo a decir que muchos nos quedamos con la miel en los labios tras terminar este juego y queremos más, y lo queremos lo más pronto posible!!!